EL "COMANDANTE H" CONTROLÓ TRATA, HUACHICOL Y VENTA DE DROGA EN TABASCO: "LA BARREDORA" DESATÓ DISPUTA TERRITORIAL: EL UNIVERSAL

Con , que se constituyó en 2020 como una célula independiente con presencia principalmente en la zona metropolitana de Villahermosa, Tabasco, y localidades colindantes, el prófugo exsecretario de Seguridad Pública del estado, , buscaba controlar el tráfico de migrantes, robo de combustible, venta de drogas, trata de personas y las actividades ilícitas en antros y bares de la tierra natal del expresidente Andrés Manuel López Obrador, informa hoy El Universal.

Pero su alianza con el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) para enfrentar al Cártel del Golfo (CDG), con histórica presencia en el sureste del país, provocó una fractura interna que derivó en el surgimiento, en diciembre de 2023, de dos grupos criminales, La Barredora Autónoma y la facción alineada al CJNG-Tabasco, que actualmente mantienen una violenta disputa territorial.

De acuerdo con autoridades federales, la ruptura se habría originado porque Ulises Pinto Madera, "El Mamado", recién aprehendido, quería entregar la plaza al CJNG tras la salida de Bermúdez Requena de la Secretaría de Seguridad de Tabasco, lo que desató una ola de violencia en la entidad entre 2023 y 2024.

En dicho periodo, los asesinatos se incrementaron 202%, al pasar de 234 en 2023 a 707 en 2024, según cifras del Sistema Nacional de Seguridad Pública, con diversos hechos que incluyeron decapitados, enfrentamientos entre las dos facciones en pugna y narcobloqueos.

Lo que actualmente se conoce como La Barredora quedó desde entonces al mando de Bermúdez Requena, alias "El Abuelo" o "Comandante H", mientras que la facción afín al Cártel Jalisco, a cargo de Daniel Hernández Montejo, "El H", "El Prada" o "El Chichirria", quien es buscado por las autoridades federales.

Según reportes de Inteligencia, la facción subordinada al Cártel Jalisco heredó parte de la red de contactos y el brazo armado de La Barredora; opera bajo un esquema militarizado, a cargo de Efraín Luna Oliva, un expolicía tabasqueño apodado "El 50" o "El Tostón", líder regional de ese grupo en Centro, Tabasco.

En tanto, La Barredora mantuvo sus estructuras civiles y de contactos en cuerpos de seguridad municipales y estatales, pues desde su inicio se conformó con expolicías locales con los que afianzó una red para sus actividades ilícitas y estableció pactos con autoridades.

La pugna entre ambos grupos criminales tiene su epicentro en la capital tabasqueña y municipios aledaños, considerada una zona clave para delitos como la extorsión, cobro de piso, secuestro y control de actividades ilícitas en bares y centros nocturnos, de acuerdo con los reportes de autoridades federales.

En Villahermosa y sus alrededores generan zonas de conflicto y enfrentamientos, además de que han establecido pactos temporales con autoridades de todos los niveles, lo que les facilita la construcción de redes criminales y de corrupción.

En los municipios de Cárdenas y Paraíso se disputan rutas de traslado de hidrocarburos y armas; en Nacajuca y Jalapa, las áreas rurales de cultivo, el robo de ganado y el paso de cargamentos de drogas procedentes de Centroamérica.

En Tacotalpa y Macuspana -este último, el municipio de origen del expresidente López Obrador-mantienen enlaces con redes indígenas y control en caminos secundarios para sus actividades ilícitas.

De acuerdo con los informes, a los que tuvo acceso EL UNIVERSAL, la estructura de la facción del Cártel Jalisco Nueva Generación-Tabasco se compone por Daniel Hernández Montejo, El H o El Prada, identificado como líder estratégico y con zona de operación en Villahermosa; Abraham Regil Pérez, El Raya, operador logístico con asiento en el centro de Tabasco.

Édgar Soto Zavala, El Zavala, enlace con el CJNG a nivel nacional y con presencia en los municipios de Jalapa y Centla; Blasimiro Sánchez Marín, El Blass, encargado del tráfico de armas en Cárdenas.

Así como de Euler Rubalcaba Colorado, El Rayo, encargado de la cobranza y seguridad en Centro y Paraíso; Alejandro Patrón García, El fresa, finanzas regionales; Justiniano Hernández Medina, Medina o El Patachín, logística y transporte; Luis Antonio García Rodríguez, Balú, inteligencia de campo con zona principal de operación en Centro y Jalapa; Arturo Gómez Marín, El Vampiro, enlace con células en Tacotalpa.

En tanto, la estructura de mando de La Barredora ha sido afectada en los últimos meses por las autoridades federales, con la detención de Francisco Javier Custodio Luna, alias El Wasón, responsable del tráfico de drogas, extorsiones y homicidios en los municipios de Centro, Cárdenas, Cunduacán y Nacajuca; y de Ulises Pinto Madera, El Mamado, exjefe de escolta de Hernández Bermúdez y fundador de La Hermandad o Cártel Policiaco.

Tras la detención de ambos y la fuga de Bermúdez Requena, extitular de Seguridad Pública en Tabasco, la autoridades federales ven a Carlos Tomás Díaz Rodríguez, El Lic o Tomasito, como la nueva cabeza de La Barredora.

El Lic o Tomasito estaría operando en conjunto con Héctor López Mendoza, El Soplete; Erick Jhovani Pérez Villaseñor, El Gato, y Óscar Acosta Camacho, La Mosca, líderes regionales del mencionado grupo criminal.

La disputa entre ambos grupos criminales por el control del territorio para el fortalecimiento de sus actividades delictivas, entre las que destacan extorsión, robo de hidrocarburos, venta de droga, tráfico de migrantes y armas de fuego, generó un alza en la violencia e incidencia delictiva en el estado de Tabasco, que es gobernado desde 2018 por el partido Morena.