El alfil negro
Por Ramón Ortiz Aguirre
LA TRAIDORA NORTEÑA ESTÁ EN ECUADOR
"In foro conscientiae"
(En el tribunal de la propia conciencia)
No hay nada más detestable que la traición y en la presente administración a nivel nacional, hemos sido testigos de esta ruin acción y cuando hablo de traiciones no sólo me refiero a lo que ha hecho Lilly Téllez o German Martínez, oscuros personajes que han mordido la mano de quien los sacó del ostracismo y les dio de comer, pero como bien dice la Biblia: “por sus hechos los conoceréis”, pero no son los únicos, otros individuos se soslayan presumiendo, a través de redes sociales, su capacidad para traicionar y agredir verbalmente a quien no piensa como ellos.
En los últimos días no ha dejado de fluir información sobre la toma de la embajada de México en el Ecuador, la mayor parte de la gente opina que esto ha sido una afrenta, pero una pequeña minoría que se sienten parte de la realeza no sé si española, británica o del carnaval de Veracruz, culpan a AMLO, se regocijan haciendo y diciendo una serie de tonterías, de pronto esos individuos se han sentido diplomáticos de carrera, antes fueron peritos en construcción de aeropuertos, trenes, presas etc., se sintieron médicos capaces de curar del COVID y hasta la lepra.
Pero muchos de esos críticos acérrimos, influidos por supuestos intelectuales, comentaristas de radio y televisión y algunos aspirantes a influencers, desconocen los principios básicos de la diplomacia y lo peor ni siquiera se han enterado que la orden de la invasión a nuestra representación diplomática, fue dada por una mexicana originaria de Durango, la cual responde al nombre de Mónica Rosa Irene Palencia, quien en su carácter de ministra del Interior y siguiendo el mandato del déspota presidente ecuatoriano Daniel Noboa, firmó y dio la orden tajante de invadir esa porción del territorio nacional.
Esta mujer apátrida a la edad de 21 años, emigró al Ecuador en 1986, tras haber cursado estudio de abogacía en la Universidad Juárez de Durango. Ella jura que terminó la carrera, pero en el Registro Nacional de Profesiones no se encuentra registrada ninguna cédula profesional ni título a su nombre.
En Ecuador volvió a estudiar derecho, contrajo nupcias en dos ocasiones y ha enviudado dos veces, se hizo amiga del actual presidente y él le dio la nacionalidad justo entrando al mandato y de pasada la nombró ministra.
La traición de esta mujer debe de ser juzgada en México y nuestra ley señala que la traición a la patria, se castiga con pena de prisión de cinco a cincuenta años y multa de cincuenta mil pesos. Como vemos el castigo es muy simple y benigno para la magnitud del crimen cometido, pero toda vez que vive en Ecuador se le puede quitar la nacionalidad mexicana, nombrarla como una persona indeseable e impedirle el ingreso a nuestra patria.
Las opiniones aquí expresadas son responsabilidad del autor y no necesariamente representan la postura de Ajedrez Político SLP.
RAMÓN ORTIZ AGUIRRE
Originario del Centro Histórico de San Luis Potosí, Profesor Investigador de la Facultad de Ingeniería de la UASLP y Jefe de la División de Difusión Cultural de la misma institución, actualmente jubilado. Especialista en agua y medio ambiente.