Ajedrez Huasteco
Por Jesús Sierra
PIRATAJE EN EL TRANSPORTE: CORRUPCIÓN E IMPUNIDAD
Hace un poco más de 20 años, quien aquí escribe, recibí una solicitud de un cliente transportista para desarrollar una investigación en torno al problema de la prestación irregular del servicio público de pasajeros, conocido en la región Huasteca como "pirataje".
Entonces levantamos una encuesta de campo, entre otras actividades, para conocer el problema planteado. Recuerdo una charla que tuvimos con un conductor de un vehículo de transporte con placas del servicio público local, que encontramos prestando el servicio a bordo de una carretera federal, lo cual, desde luego, representaba una transgresión a la Ley de Vías Generales de Comunicación. En esa plática le pregunté a este conductor que si sabía que estaba cometiendo una falta administrativa al prestar el servicio en una vía federal, sin tener autorización para ello. Me dijo tranquilamente que "sí"; entonces le cuestioné su conducta y con una sencillez y una tranquilidad, que aún recuerdo, me respondió: "¡Pues porque nadie me dice nada".
Por aquellos años la Secretaria de Comunicaciones y Transportes federal, desplegó un programa con el que se pretendió regularizar a los vehículos particulares y de servicio público local que prestaban el servicio en diversos puntos de carreteras federales en la entidad. Emitieron unas calcomanías de color naranja con las que pretendieron levantar un censo veraz de todos los vehículos que se encontraban en esta situación, calcomanías que finalmente terminaron, muchas de ellas, vendiéndose al mejor postor.
También se creó una unidad especial de inspección al transporte de la policía federal, que poco aportó a la solución del problema.
En este lapso de tiempo han pasado muchos delegados de la SCT en la zona Huasteca. Algunos emitieron documentos conocidos como "memorándum", con los que autorizaban a vehículos de transporte a prestar el servicio, aún sin contar con una concesión del Estado. Otros inventaron el término “tolerados” para el mismo fin y, otros más, sólo recibieron "mochadas" para hacerse de la vista gorda, lo cual desde luego contribuyó a generar un problema que hasta el día de esta fecha no encuentra solución.
Vinieron entonces las plataformas digitales y con ello surgieron prestadores de transporte de pasajeros que de manera irregular ofrecen el servicio sin respetar rutas, itinerarios y sin contar con la concesión que exige la Ley. Entonces aparecieron ex policías, ex inspectores de la SCT, ex choferes de empresas que conocen bien el problema, que crearon flotillas de vehículos que prestan el servicio de pasajeros y de paquetería menor. Un esfuerzo infructuoso para combatir este problema, que hasta el día de hoy, no ha dado los frutos que se esperaban con la inserción del delito de "pirataje" en el Código Penal del Estado.
La impunidad y la corrupción han venido acompañando a este problema en el transporte desde hace muchos años. Hoy existe otro factor del que no se quiere hablar abiertamente, pero que se volvió muy conveniente para justificar la incapacidad de la autoridad para combatir el pirataje. Mientras, las flotillas irregulares crecen y no hay manera de poner orden.
Así las cosas.
Las opiniones aquí expresadas son responsabilidad del autor y no necesariamente representan la postura de Ajedrez Político SLP.
JESÚS SIERRA
Abogado por la UASLP. Experto en acceso a la información, transparencia y rendición de cuentas. Colaborador y columnista en varios medios de comunicación entre ellos Ajedrez Político SLP. Radica en Ciudad Valles, la puerta grande de la Huasteca potosina.