Reina del mediodía

Por Jorge Ramírez Pardo

Reina del mediodía: maestra Palau

La tarde de este jueves 29 de febrero, se inaugura en la capital potosina la muestra pictórica Personajes, de la autoría de Teresa Palau. Sin duda, se trata de una de las más sólidas y prolíficas pintoras de su entorno y generación.

La cita es a las 19 horas en la Casa de la Cultura, hoy denominada Museo Francisco Cossío.

A pregunta expresa respecto a los motivos y contenidos de la exposición, la autora contestó lo siguiente:

Propósito específico de la muestra Personajes

Qué sigue en mi vida, y cómo se ve en retrospectiva en relación la obra, la vida y la existencia.

El título de la exposición Personajes es evidencia del tema de la exposición. La muestra evoca rostros imaginarios y oníricos: unos perdidos, que tal vez fueron, pero que ya no son...

“Personajes” es un monólogo artístico que María Teresa Palau establece como un canal de comunicación.

El propósito de la exposición es propuesta de diálogo, anticipo de la felicidad que siento cuando tengo oportunidad de mostrar a mis amigos y a todas las personas a quienes interese lo que he hecho, e inicia espacio de vida que se llama arte; en este caso, pequeña muestra lo que me gusta dibujar; en este caso, no un espacio mágico sin un montón de rostros, sino la imagen de personajes, y me han acompañado durante una buena parte de mi vida

El arte puede ser catártico, pero la intensidad varía si se representan algunos personajes o algunos hechos o situaciones terribles y dañinas; puede ser especialmente dramático.

A mí me gusta representar personajes; pueden ser guerreros, héroes, villanos, ángeles o demonios y corresponden a una forma de ser que me acompaña desde la infancia cuando empecé a leer gracias a mi hermano y descubrí que, además de las vidas que viven las los niños en sus juegos, hay otras llenas de letras en industrias de papel que nos hacen vivir despiertos, mucho más cosas que en los sueños.

El arte nos da posibilidad de vivir emociones; gran intensidad y posibilidad de escapar de uno mismo. También permite variar de identificación o ser otra persona, quien sea, pero otro diferente.

Cada experiencia necesita una censura o por lo menos una evaluación. Las piezas que conforman la muestra son otra versión del mismo lenguaje plástico de la pintora. Un rostro que se convierte en una máscara, con distinta cascos y ornamentos, momentos de luces y sombras, un trabajo con carácter, definido y muy reconocible.

Durante el proceso creativo, el arte puede cambiar, la obra tiene valor intrínseco además de su valor cultural y económico y social; el artista es más otro participante en la actividad cultural de un lugar.

Esa es la idea que me suscitó exponer, porque mis personajes dicen más de quien soy. O, tal vez, los personajes tengan mucho más significados, porque esos no dependen solamente del autor más bien depende del espectador. El significado lo da él y lo de menos es qué quiso decir el artista; esa es la importancia de una exposición ante la sociedad, porque no es otra cosa más que eso exponerse

Dibujo y pinto muchos personajes. Unos parecen ángeles y otros demonios, pero todos corresponden,  a fuera de la historia, más bien personajes de ficción que permiten encontrar líneas, colores, verdades fundamentales de la vida y de los sueños. No son relatos, simplemente los personajes están ahí; no están haciendo nada, son como instantáneas, pero permiten encontrar lo que considero son verdades fundamentales: la vida en la muerte, la angustia, la alegría, la soledad, la amistad. A veces parecen personajes dañinos y algunas inocentes, otros misteriosos o tan sencillos, que se parecen más a esta persona que, entre más vive, encuentra que la sencillez es mucho más divertida.

El mal del presente, que forma parte de todas nuestras angustias y nos afecta a todos es la " pérdida del alma". Por ello, el personaje pintado es una cosa inanimada, tiene alma, es alguien que mira. En el arte, el personaje parece que tiene rostro, pero ahí no hay nada, no hay signo de realidad, solamente hay la emoción del artista.

En algunos casos, el rostro del personaje es una réplica de los rasgos naturales, pero en otras hay diferencias significativas o modificaciones. Se rompe la distinción entre los rostros y los personajes, porque unos y otros parecen al mismo tiempo inertes y vivos, reales y oníricos. La fascinación por el rostro del personaje es parecida a la seducción. Creo que estoy en la búsqueda de ese lugar oblicuo de la fantasía donde, quizá, se encuentra al ser utópico.

Es el mundo al revés: los personajes no ocultan, al contrario, revelan qué subyace bajo la aparente civilizada normalidad. Es entrada a espacio mágico, sensación de estar más allá de las ideas. Espacia campos, diferencia entre intuiciones, no es intensiva sino extensiva. 

Por esa extrañeza y familiaridad, los personajes nos suelen parecer el momento originario del conocimiento en nuestra relación intersubjetiva. Se perciben en la obra del artista, los rostros de la pintura que se basa en una constante búsqueda por la autonomía y la claridad del objeto construido, resultando en una presentación artística de un espacio sin jerarquía aparente. Porque en ellos no hay ambigüedad, los identificamos de inmediato como lo que son: el antifaz es antifaz y eso parece, productos artísticos; todas las diferencias son las relaciones entre elementos. En una producción. parecen estilos diferentes, pero se integran y se complementan.

Si el personaje es la superficie y el momento temporal donde se nos da la impresión del otro, entonces hay poca (o nada) de misticismo en estas obras. Pero, si el rostro es cálido y suave o tenso y agresivo, si es alegre, necesitado, suficiente, perplejo, asustado, triste, cordial o autoritario o tienen aspecto furioso con ojos terribles que asustan a los causantes del mal porque ahí en el rostro están los movimientos del alma, ahí se hacen visibles y su lectura nos capacita para reaccionar adecuadamente en el intercambio humano.

Los personajes mantienen un rictus de inmutabilidad que les otorga un hieratismo irreal; los seres híbridos que crea, las arañas o los cactus humanos, poseen un rostro totalmente disonante con el resto de su cuerpo, como si fuera un acoplamiento ajeno o forzado; sus santos y budas mantienen la fuerza del cuadro congelada en sus rostros, misteriosos personajes que siempre comunican algo “más allá” de la obra.

 

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INTERMEDIO

También en la capital potosina:

El cielo y la ciudad de Alejandra Montelongo.

Muestra de pintura franciscana Pax et bonun estará en galerías de Caja real hasta el 19 de mayo

Cotlicue, de Juana María Palomino, hasta el 3 de marzo.

SEMBLANZA DE TERESA

 

Ex alumna del Instituto Potosino de Bella Artes, IPBA, también es reconocida como profesora emérita jubilada de la Facultad del Hábitat, de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí, UASLP, y analista de arte.

 

En encuestas de opinión realizadas para el historial de la Facultad del Hábitat, cuando el plantel cumplió 40 años, ella y Francisco Marroquín resultaron ser  los docentes más reconocidos. Autora de profusa cantidad de pinturas, y de varios libros de arte y semiótica.

 

A diferencia de la mayoría de los pintores y dibujantes/grabadores de su generación, ella siempre ha mostrado una genuina independencia.

 

Si bien, en 2014 hubo una muestra retrospectiva copiosa con la obra plástica de Teresa Palau, el universo local del arte está en deuda con ella, respecto a la divulgación de su obra artística.

 

Son proverbiales las charlas y conferencias de la maestra Palau acerca de arte moderno y contemporáneo. Mujer de lecturas y sólidas reflexiones acerca del arte siempre en proceso de exploración y análisis.

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Agrega la maestra Teresa:

Mi carrera es larga y he realizado muchas exposiciones, tanto nacionales como internacionales y la obra se encuentra representada en colecciones públicas y privadas.

Actualmente, el concepto del artista y del arte exigen una fundamentación de la obra plasmada en un proyecto que manifieste cuál es su esencia y su objetivo al mostrarlo al espectador. La obra con diferentes lenguajes y técnicas invita a esta especie de conversación visual al proponer un cauce de comunicación con el espectador. Cuando se lleva una obra a una exposición se instala la obra. El concepto exige la fundamentación en la apertura del significado para alcanzar su esencia histórica artisticidad es condición primera de creación donde no es una comprensión del lugar a experiencia de imaginación.

Un papel fundamental en el personaje es dar sentido de continuidad, de unión entre el presente y el origen de los tiempos, lo cual es de vital importancia en la integración de las culturas. Una construcción artística de la personalidad exageradamente consecuente que tiene su personificación en la figura del guerrero

Hay degradados acromáticos con tinta y una paleta de colores casi siempre restringida cromática, donde los rojos, ocres, blancos que utiliza y negros son protagonistas desde la estética de la mancha en el papel para dar lugar salpican el soporte irregularmente trabaja desde el lenguaje de la figuración, Por otro lado, las sutilezas de los trazos, las aplicaciones del color y las texturas con espátula generan juegos de transparencias y volumetrías que trascienden el soporte bidimensional. También presenta un conjunto de dibujos a tinta realizados en blanco y negro, terminan de ofrecer exploraciones acerca de varios de esos personajes perdidos… El hecho de que he trabajado en algunas de las piezas expuestas fusionando lenguajes de manera libre y sin forzar ninguna de las partes da como resultado es una conversación entre técnicas, donde ninguna prevalece sobre la otra, sino que dialogan de forma sutil.

Creo que en el dibujo ya veces en la pintura sobre todo cuando es a la prima será la experiencia de poner en materia no solamente una intuición intensa sino también extensiva. Hay unas con un trazo rápido que esparcen los rostros con alusiones literarias, trabajados a través de texturas que definen las imágenes han sido realizadas con tinta sobre soportes varios como el papel, cartón o lienzo, introduciendo entre las diferentes pinceladas, en ocasiones, collages que se integran como un ensamblaje en la obra.

La intuición es una forma de pensamiento intenso que lo tenemos todos pero que a veces no nos atrevemos hacer extensiva esa forma de pensamiento y creemos que una actitud contradictoria corresponde mejor a esta forma de vida la vida artística. Creo que está en el primer plano de la experiencia artística pero que siempre es el resultado de una necesidad tal y no como muchas veces se piensa que el artista es un ser diferente que vive la vida entre el gozo y la tragedia y que siempre lleva al arte cualquiera de los sentimientos que están presentes en la obra

 

Las opiniones aquí expresadas son responsabilidad del autor y no necesariamente representan la postura de Ajedrez Político SLP

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