Los Expedientes del Imperio
Por Jaime Contreras Huerta
Cuando hablas mal del país
“… Me da mucha risa la comparación con Maximiliano”, fue la respuesta de Xóchitl Gálvez al periodista Álvaro Delgado, tras cuestionarla por su visita a Estados Unidos con la siguiente pregunta: “Se les llama vendepatrias a todos aquellos mexicanos que van al extranjero a solicitar a gobiernos y organismo extranjeros que intervengan en asuntos que sólo le competen a los mexicanos, No es de ahora, particularmente es desde el siglo pasado o antepasado cuando fueron los conservadores a traer a Maximiliano. No es una dedicatoria para usted, yo le pregunto a usted si le parece patriótico ir al departamento de estado de Estados Unidos, ir a la OEA a que interfiera en asuntos de los mexicanos”. Con la respuesta de Xóchitl es posible advertir que no sabe de técnicas de escucha, que el ego la domina, ya que Álvaro Delgado no la comparaba con Maximiliano por lo que desconoce la historia de México, quizá porque la concibe a partir del Gobierno del Ranchero Vicente Fox hasta el presente desde una perspectiva conservadora neoliberal.
Blanca Estela García Gutiérrez, autora del articulo La cosmovisión política de nación conservadora en México a mediados del siglo XIX. Una retrospectiva a través de la prensa, expresa que “la manera en que los conservadores se integraron al espacio político, su participación en el poder y su actuación como grupo político en el México Republicano, fue expuesta por ellos mismos a través de la prensa cuando la vida de la sociedad mexicana durante la primera mitad del siglo XIX estaba inmersa en una serie de fenómenos como la herencia colonial, los resultados de la guerra de Independencia, el influjo del liberalismo euroamericano; la presencia del modelo de modernización de la revolución Industrial, los efectos de la Independencia de los Estados Unidos y las guerras europeas de 1789 a 1848.”
La autora, realiza una revisión de los diarios capitalinos conservadores más importantes de mediados del siglo XIX: El Tiempo. que apareció de enero a junio de 1846 y El Universal, en los años 1849 y 1860. Afirma que “el Tiempo fue un diario de difusión política de la llamada causa monárquica, Desde sus inicios mostró una posición política y afirmó su deseo de establecer en México una monarquía constitucional con un príncipe extranjero”, es decir que la aspiración de los conservadores por entregar el país a extranjeros viene desde entonces. Esta idea recibió inmediatamente una “respuesta violenta del periódico liberal El Memorial Histórico. Respondiéndole que un príncipe extranjero vendría a a acabar con la Independencia. El Tiempo replicó a los republicanos, aclarando que el príncipe extranjero tendría sólo el poder supremo, porque todos los demás puestos administrativos serían ocupados por mexicanos razón por la que no se les podía acusar de antipatriotas. Los puestos administrativos serían ocupados por aquellos que pertenecían a las altas dignidades de la iglesia, la milicia. los magistrados. propietarios, fuertes capitalistas e industriales. Y además hombres de ciencia y arte”.
“La prensa monarquista de El Tiempo. Sufrió un golpe emocional cuando El Congreso Extraordinario que, se había establecido en abril, tomó la decisión de instaurar como forma de gobierno, la República, misma que rechazaba El Tiempo, por lo que decidieron retirarse de la circulación y no traicionar sus principios ideológicos ni apoyar más al gobierno”.
Blanca Estela García, explica que “el triunfo de la revolución francesa en 1848 sobre la monarquía hizo que las monarquistas mexicanas tomaran una posición más cauta en sus proyectos. Sus planes políticos fueron tomando forma a raíz del fracaso de la guerra con Estados Unidos en 1848 y la debilidad que prevalecía en la República Federal. No será hasta 1864, cuando, dentro de otro contexto nacional e internacional. se cumplan sus propósitos con el establecimiento del Segundo Imperio con Maximiliano de Habsburgo.
Lo anterior ejemplifica las primeras acciones de los conservadores por entregar el país a extranjeros con la finalidad de preservar sus privilegios e ideología. De esto es que se llame vendepatria a Xóchitl Gálvez porque fue a decir a Estados Unidos, que no estábamos preparados para la relocalización de empresas que demanda el nearshoring, que no tenemos capacidad para brindar el suministro de agua y electricidad que se requiere para grandes proyectos, En resumen, fue hablar mal del país y se subordinó a los intereses de los gringos. Les dijo que no es viable invertir en México, lo cual implica un gran problema, ya que le resta capacidad de negociación al estado mexicano.
En la historia reciente otros mexicanos con cargos de gobernadores, dirigentes partidistas y empresariales han acudido al gobierno estadounidense y a la Organización de Estados Americanos (OEA) para acusar y pedir a título personal la intervención en nuestro país contra el Gobierno de la República. José Castro publicó en el Sol de Zacatecas el siguiente listado: el gobernador de Michoacán, Silvano Auroles Conejo pidió a la OEA “no abandone a México en riesgo de convertirse en narcoestado” (27/julio/2021), el partido Movimiento Ciudadano “denunció ante la OEA al gobierno mexicano por manipular acciones en proceso electoral 2021” (17/mayo/2021); el historiador Enrique Krause Kleinbort que, en su artículo publicado en el diario estadounidense New York Times “le pide al presidente de EEUU intervenir en la política mexicana” (16/marzo/2021); el presidente de la Confederación Patronal Mexicana (COPARMEX) Gustavo de Hoyos Walther, quien se unió al “señalamiento de los congresistas norteamericanos para acciones contra el gobierno mexicano en materia de reforma energética” (21/julio/2021).
Las opiniones aquí expresadas son responsabilidad del autor y no necesariamente representan la postura de Ajedrez Político SLP
JAIME CONTRERAS HUERTA
jcontrerash44@gmail.com
Maestro en Historia por el colegio de San Luis A.C. y Licenciado en Ciencias de la Comunicación por la Universidad Autónoma de San Luis Potosí.