Los Expedientes del Imperio

Por Jaime Contreras Huerta

Discursividades con fuerza y corazón

Para abordar las discursividades de Xóchitl Gálvez, como abanderada opositora en las elecciones presidenciales de 2024, con el propósito de identificar su mayor debilidad:  insuficiente habilidad argumentativa de índole político resulta pertinente considerar la perspectiva de Michel Foucault sobre que, “la manera en la cual las personas hablan es muy reveladora. Las palabras que escogen, los ejemplos que se usan y cómo construyen sus argumentos son el resultado de un largo proceso de arquitectura de identidad, asimilación de valores y socialización”. Otra perspectiva es la de Rafael  Echeverria, que en su texto sobre La Ontología del Lenguaje explica que “los seres humanos se crean a sí mismos en el lenguaje y a través de él.

El domingo 5 de junio de 2023, cuando Xóchitl Gálvez fue electa coordinadora del bloque opositor, dijo, "Hoy hay oposición, que se oiga fuerte y claro: aquí está la oposición. En muy poco tiempo le dimos la vuelta al pesimismo, me lo dicen en las calles". Fue entonces cuando empezó a configurar su idea de un país con una realidad social, política y económica muy lejana de la verdad.  Se trata de una afirmación, expresada en forma de enunciado que es falso.  Rafael Echeverría, refiere “que uno de los códigos lingüísticos son las afirmaciones que expresan hechos e ideas verdaderas o ciertas.” En este sentido, lo expresado por   Xóchitl Gálvez sobre la percepción de la gente puede ser considerado falso, ya que la realidad social, política y económica de un país no puede ser modificada significativamente en "muy poco tiempo", como ella sugiere. Los cambios estructurales y sistémicos requieren de procesos largos y complejos, y es poco probable que se logren de manera rápida. Además, la percepción de la gente en las calles no necesariamente refleja la realidad objetiva de la situación política y económica del país

En septiembre del mismo año dijo, “No vamos a recurrir a la ofensa, al insulto, a la descalificación. México necesita a una presidenta que respete a todas y todos.” Esta frase devela una intención o en cierta medida una promesa, pero como código lingüístico se trata de una declaración que implica la intención de hacer algo o de tomar una decisión. Pero Xóchitl Gálvez, ni como promesa o intención la ha cumplido, ya que siempre recurre al insulto y a la grosería, ignorando, como otros tantos cuidados, que en   la comunicación política no se recomienda recurrir a la ofensa, al insulto ni a la descalificación.

Pero su promesa más incumplida fue la que profirió para comprometerse: “Ni huevones, ni rateros ni pendejos” en su proyecto político, lo cual tampoco ha cumplido, sobre todo, con la selección de candidatos panistas y priistas   para las senadurías y diputaciones plurinominales que se repartieron entre los viejos de la política prianista, es decir dinosaurios como el personaje que representó Xóchitl Gálvez cuando fue senadora. El llamado agandalle partidista la contradice, ya que se considera  una candidata ciudadana, pero subordinada a los partidos del frente opositor y alejada de la sociedad  civil.

En su cierre de precampaña afirmó que “Hoy, México está peor que cualquier país en estado de guerra”. Lo dijo sin presentar premisas válidas para argumentar sobre la realidad que se vive en México. Será que se puede mentir, así de fácil, cuando “la verdad ya es irrelevante”, como supone el farsante, Raymundo Riva Palacio. Ese día de falacias, hubo de todo como lo de que, “se pierde la libertad cuando el gobierno amenaza a las empresas. Cuando pretende quedarse con los ahorros, afores y pensiones de los mexicanos”. Con esto se confirma lo que explica Foucault: “los ejemplos que se usan y cómo se construyen los argumentos, son el resultado de un largo proceso de arquitectura de identidad”. Es decir, que la realidad del país, en la cognición de la  candidata de Fuerza y Corazón por México,  es resultado de un proceso político mediado por gobiernos prianistas  que mentían y  engañaban sin  recato para mantenerse en el poder. Les bastaba declarar lo que fuera para ocultar sus fechorías. En ese contexto, Xóchitl Gálvez, se inventó una sociedad a la que le puede mentir de cualquier manera, con un corazón vacío  y con la fuerza de las falacias.

Otra de sus exaltaciones fue la afirmación de que” Con este gobierno se está perdiendo el valor de la libertad” y aseguró algo como “Vida, verdad y libertad, eso es lo que está en juego este año. ¡Libertad! ¡Libertad! ¡Libertad!”. Su dicho devela un sentido persuasivo trasnochado. Se trata de un término polisémico con cierta indeterminación y exaltación extrema. En palabras de Enrique P. Haba, “algo así, como una flecha que no apunta, por sí misma, hacia lado alguno...salvo, claro está, que alguien la tome en sus manos y la haga apuntar hacia este lado o hacia aquel”. Quizá Xóchitl lo que anhela es la libertad de mercado que apunta hacia un regreso al liberalismo que, en palabras de Andrés Espinosa Fenwarth, es una doctrina económica “ donde la competencia define las relaciones humanas y los ciudadanos son  simples consumidores que ejercen su libre albedrío sólo cuando compran o cuando venden. El proceso meritocrático  es el que  castiga la ineficiencia, el mercado se erige por encima de todo lo demás, incluso del Estado Social de Derecho y le da a cada cual lo que se merece,  con lo que garantiza que sólo los más ricos sobrevivan y  la desigualdad  prospere.

Si a los enunciados de Xóchitl Gálvez, le agregamos su risa, es viable  considerar lo que explica Horacio Campos Lozada  sobre que “Las risas nerviosas o insalubres provienen de la  garganta, no son consideradas como una verdadera risa, sino una expresión de estrés emocional tensión y ansiedad que incluso aumenta la torpeza de la situación. Generalmente se considera a la risa nerviosa como farsa”.

 La promesa de sus mañaneras “verdaderas” … será o no será,  “esa es la cuestión”.

Las opiniones aquí expresadas son responsabilidad del autor y no necesariamente representan la postura de Ajedrez Político SLP

JAIME CONTRERAS HUERTA

jcontrerash44@gmail.com

Maestro en Historia por el colegio de San Luis A.C. y Licenciado en Ciencias de la Comunicación por la Universidad Autónoma de San Luis Potosí.

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